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Formula Sound FF6.2: historia del diseño de uno de los grandes mezcladores analógicos de nuestra época (cortesía de Barry Penaligon)

[You can find the English version of this article following this link/Podéis encontrar la versión en inglés de este artículo es este enlace: https://zitroztr.wordpress.com/2017/06/29/designing-a-mixer-the-formula-sound-ff6-2-by-barry-penaligon ]

Hola a todos de nuevo.

Estoy especialmente contento por poder ofrecer este artículo que es una traducción directa (disculpad algún posible error; traducir a altas horas de la madrugada puede no dar los mejores resultados) de una información que me hizo llegar el gran Barry Penaligon, del que ya pudimos disfrutar de un artículo acerca de la historia de Formula Sound (en castellano aquí: https://zitroztr.wordpress.com/2017/06/09/historia-de-formula-sound-cortesia-de-barry-penaligon y en inglés aquí: https://zitroztr.wordpress.com/2017/06/09/a-brief-history-of-formula-sound-by-barry-penaligon ) en una de mis entradas anteriores en este mismo blog.

No sé si os ocurrirá lo mismo, pero a medida que iba traduciendo el texto, me iba encariñando más y más con este GRAN mezclador. Sinceramente, creo que si te gusta el mundo del audio, de las cabinas y/o del «pinchaje», seguramente disfrutarás de esta entrada; insisto en que NO la he escrito yo, sino que simplemente me he limitado a traducirla.

Un atento saludo, y mi especial agradecimiento a Barry.

Diseñando un mezclador: el FF6.2

FF6.2L Front Persp4

PUNTO DE PARTIDA

El FF6.2 ( http://www.funktion-one.com/products/ff62-dj-mixer/ ) comenzó a gestarse a resultas de una conversación con Funktion One; estábamos hablando sobre la FF6000, y mencionamos que Formula Sound estaba trabajando en un nuevo mezclador. Se sugirió que quizá sería interesante hacer un modelo sucesor de la FF6000 ( http://www.funktion-one.com/products/ff6000-dj-mixer/ ) y cómo debería ser un nuevo mezclador Formula Sound/Funktion One.

Mike Igglesden sería la cabeza visible en Funktion One; creé algunos diseños preliminares y mantuvimos un par de reuniones en Funktion One. David Bruml y John Newsham de Funktion One asistieron a esas conversaciones.

Desde el principio debía tratarse de un sucesor de la FF6000: una mesa de mezclas de montaje en sobremesa con los conectores en el panel superior [no en el trasero como en la mayoría de las Formula Sound], como en la FF6000. Comentamos sobre lo que nos gustaba y lo que no en la FF6000 y concluimos que el bucle de efectos debería salir del diseño.

FF-6000

La ya famosa FF-6000, predecesora de la FF6.2

Tenía la visión de una mesa de mezclas que pudiese utilizarse tanto para crear música (en un “home studio”) como para actuaciones en directo, así que le incorporamos un compresor en los canales 1 y 2 y los buses auxiliares. Pensé que el compresor sería útil no sólo para la mezcla de sonido en casa sino también para un segundo o tercer micrófono.

Funktion One pensaba que una ecualización de 4 bandas hecha a medida de sus altavoces sería una buena idea; además, previamente les habíamos mostrado un filtro variable en frecuencia sobre el que ya habíamos trabajado, y Mike vio que unos filtros paso alto y paso bajo variables en frecuencia serían un buen añadido a la mesa. Me di cuenta de que una ecualización de 4 bandas necesitaría más espacio que las 7 unidades de rack de la FF6000, y acordándome de la System 2000 decidí que deberíamos hacer un diseño de 8 unidades de rack.

Habíamos personalizado algunas FF6000 con una ecualización total (“full kill”), y a Funktion One les gustó cómo respondía este tipo de ecualización, así que acordamos que la ecualización de cuatro bandas debería responder a lo mismo.

Intuíamos que tener micro en el mezclador estaba bien, pero sería más recomendable mantenerlo con ecualización de 3 bandas; si no, se podría diseñar el módulo de salida similar al de la FF6000 sin el bucle de efectos. Mike pensó que un vúmetro de 12 LEDs estaría bien, así como una monitorización que fuese seleccionable a pre o post ecualización.

Así que hice un boceto de un panel frontal de 8 unidades de rack, con canales con selección de entrada A/B, control de ganancia, ecualización de 4 bandas, vúmetros de 12 LEDs, filtros paso alto y paso bajo de frecuencia variable desconectables, CUE, faders de 60 mm y envíos a dos buses auxiliares. Canales 1 y 2 con compresor seleccionable, y canales 3 a 6 con asignación a los lados A o B del crossfader.

El módulo de salida consistía en master, conmutador de insert, salida de cabina, balance de cabina, conmutador mono para la salida de cabina, ajuste de curva de fader, volumen de auxiliares 1 y 2, salida de auriculares y micro de mesa como en la FF6000 (micro con 3 bandas de ecualización). Los vúmetros serían similares a los de la FF6000.

Durante un tiempo me perseguía la idea de que la salida de zona debería ser remoteable (como debería ser en un distribuidor de zonas); el DJ normalmente no quiere tener que preocuparse de ajustar el nivel de audio de una zona específica, así que tener una control de zona que se pudiese montar en esa misma zona parecía una buena idea; por eso no hay control de volumen de zona en la FF6.L.

Hubo unas cuantas pruebas sobre cómo debía ser la distribución del panel frontal; tras algunas conversaciones, la asignación a bus auxiliar se modificó de un fader rotativo y un conmutador a dos conmutadores. Originariamente los canales 1 y 2 iban a tener un conmutador de apagado (mute) pero finalmente se eliminó del diseño.

PANEL DE CONEXIONES

Partimos de un panel de conexiones que era muy similar al de la FF6000. Posteriormente quitamos el conmutador de RIAA/Line de la parte trasera, de modo que los canales estéreo serían RIAA o línea mediante el conmutador A/B. También cambiamos la entrada de línea en los canales 1 y 2 en los conectores RCA por entradas balanceadas mediante conector jack.

FF6.2L Connections panel 1

Se habló de la posibilidad de incorporar un panel de faders desmontable como en la FF6000, pero pensé que la distribución debería ser un poco más tradicional, con el crossfader bajo los faders, y que deberíamos volver a un chasis de aluminio anodizado, así que eso fue lo que hicimos, sin panel de faders desmontable. La intención en esta fase del diseño era que EL MEZCLADOR FUESE DE COLOR MORADO.

Estas conversaciones duraron alrededor de tres meses, pero ya teníamos definidas las prestaciones y características de la mesa de mezclas y podía comenzar a trabajar en el diseño. Parte de él ya estaba prácticamente definido, porque mecánicamente la base y el panel de conexiones serían similares a los de la FF6000. El panel frontal sería de aluminio anodizado sin panel de faders desmontable, pero sí conservaría la estética de la FF6000. Las placas PCB se montarían verticalmente sobre el panel frontal (como en todos nuestros mezcladores), y los módulos de entrada serían parejas de placas PCB de los cuales el izquierdo sería la parte tradicional (entradas) y el derecho incorporaría los filtros HF y LF de frecuencia variable y el vúmetro de 12 LEDs del canal.

Había dibujado el panel frontal con una mezcla de botones rectangulares y redondos, muy en la línea de lo que habíamos hecho con la FF6000 (selección de entrada A/B rectangular, preescucha con botón circular) para ofrecer la mejor estética posible; así, los botones de los filtros paso alto y paso bajo son redondos para distinguirlos de los de buses auxiliares y de asignación de crossfader. Esos botones están retroiluminados por LED (como en la FF6000), y originariamente iban a tener 3 ó 4 colores, a sugerencia de Funktion One (los habituales rojo y verde, y además amarillo y posiblemente azul). Produjimos varios prototipos con esos botones LED multicolor, pero ambos (Formula Sound y Funktion One) llegamos a la conclusión de que era mejor dejarlos en el clásico rojo/verde.

FF6.2L Front Persp1

ELECTRÓNICA

Mientras estábamos trabajando en el diseño exterior del mezclador, yo andaba pensando cómo obtener el mejor sonido. La inclusión de los filtros paso alto y paso bajo de frecuencia variable incrementaría el consumo de corriente (más corriente y potencialmente mayor ruido), así que decidí que necesitaría 4 líneas de tierra. Serían una para las conexiones de entrada y salida otra para las señales de audio a través del mezclador, otro para las señales que no fuesen de audio, y otra para los circuitos de control (filtros de frecuencia variable y control remoto de volumen de zona).

Empecé a diseñar los módulos de entrada de los canales 1 y 2. No vi ningún motivo para cambiar el cable plano flexible para llevar la señal y la alimentación entre placas PCB, así que asigné las señales a los cables del bus flexible y vi que necesitaríamos un bus de 34 pistas.

Era evidente que con un diseño de 8 unidades de rack sería difícil diseñar las PCBs con componentes discretos en ese espacio (a diferencia de los componentes de montaje superficial, SMD). No queríamos asumir ningún riesgo por no utilizar componentes discretos (porque nuestros productos siempre han sido fáciles de reparar), así que intenté ver si aumentando la densidad de componentes aún podíamos utilizarlos. Vi que utilizar PCBs secundarias (“hijas”) me permitiría usar esos componentes discretos y meterlos todos en las PCBs.

Dibujé los circuitos que necesitaría para los canales 1 y 2, identificando dónde se necesitaría nueva circuitería, y dónde se reutilizaría de algún otro diseño. La ecualización con atenuación total sería una versión de 4 bandas de la que ya teníamos de 3 bandas en unas cuantas FF6000 y FSM-600 personalizadas que ya habíamos fabricado anteriormente, e iría en una placa secundaria. Funktion One especificó las frecuencias, calculé los valores de los componentes y construí la ecualización en esa placa “hija”.

Quería mantener los micros en un bus separado de micros porque no estaba seguro de que los micros de los canales 1 y 2 fuesen a ser internos. También necesitaba una monitorización separada de pre y post ecualización. Estos dos requisitos implicaban señales conmutables de micro/línea y salida de monitores pre/post EQ; en ambos casos la conmutación era similar, pero no se podía adaptar a los conmutadores que ya teníamos; necesitaríamos o bien relés o bien conmutación mediante transistores FET. A pesar de que ya habíamos utilizado relés en la FF6000 para el bucle de swap, nunca me pareció la mejor solución, así que decidí que sería mejor usar conmutación por FETs. [Nota sobre el bucle de swap/de delegación/de conmutación/loop swap, del manual de la FF6000: «LOOP SWAP – Este conmutador permite la asignación del procesador de efectos; por ejemplo, si se estaba utilizando un solo procesador, conectado a FX1 (asignado desde el XF-A), se podría utilizar en el bucle loop 2 (asignado desde XF-B) simplemente pulsando el botón Loop Swap. Los colores rojo y verde de sus LEDs también conmutan como recordatorio de que la asignación swap está seleccionada»]

En 2009 revisé la conmutación del bus de micros en la PM-100 para utilizar conmutación mediante FET, así que decidí adaptarlo en una placa auxiliar para usarlo para señales estéreo. Este tipo de conmutación se podía activar con el conmutador de entrada A/B para micro/línea, y con el de pre/post EQ, así que resolvía ambos problemas a la vez.

PM100

La PM-100 en configuraciones de 8 y 4 canales

Los integrados disponibles comercialmente para los vúmetros LED se habían vuelto obsoletos, así que decidí utilizar un vúmetro de 12 LEDs basado en transistores en las entradas. Esta forma de implementarlo tiene la ventaja de que utiliza una sola corriente para todos los LEDs en serie, a diferencia de las corrientes en paralelo, así que la corriente utilizada es menor. La PM-80R utiliza este diseño, así que lo reutilicé para los vúmetros.

Originariamente todos los LEDs serían rectangulares de 5×2 mm, pero Ian McDonald (Formula Sound) pensaba que los LEDs circulares ofrecían mejor aspecto. Ya estábamos utilizando LEDs circulares en la PM-80R. Tras una breve conversación con Funktion One, estuvieron de acuerdo y nos quedamos con la idea de los LEDs circulares (excepto para el Mute).

FF6.2L Detail1

Los filtros paso alto y paso bajo de frecuencia variable estaban basados en un circuito que habíamos desarrollado hacía algunos años, pero uno de los componentes ya no estaba disponible, así que tuve que empezar prácticamente desde cero con un nuevo diseño. La frecuencia de los filtros varía mediante un potenciómetro, con una resistencia digital se ajusta un control digital, pero manteniendo la señal en analógico, así que utilizamos esa resitencia digital o “digi-pot” para variar la frecuencia de los filtros HF y LF MANTENIENDO LA SEÑAL EN EL DOMINIO ANALÓGICO EN TODA LA CADENA de audio.

El compresor está basado en el de la FSM-600, a pesar de que éste opera sobre las entradas de micro y línea de los canales 1 y 2. Decidí que sacaría los controles de umbral y compresión fuera del mezclador, para que el usuario pudiese cambiar los ajustes (como en una sala, no en un directo).

El resto de circuitos de entrada son muy similares a los de la FF6000; el circuito de micro es idéntico.

Los canales estéreo 4-6 están basados en los canales 1 y 2 pero sin compresor, sin conmutador FET de micro de bus, con asignación A/B y la entrada Línea/Micro se sustituye por RIAA/Línea. La entrada de phono se ha puesto en un módulo independiente porque cabe la posibilidad de utilizar otro circuito RIAA en el futuro.

Con la sección de entradas ya diseñada, comencé con las salidas. Consisten en 4 PCBs montadas verticalmente y un PCB para vúmetros montado horizontalmente tras el panel frontal (la FF6000 tiene 4 PCBs + display).

La placa del micro de mesa y de auriculares es muy similar a su equivalente en la FF6000. La única diferencia real es la ecualización de 3 bandas en el micro en lugar de la de 2 bandas de la FF6000. La selección pre/post ecualización es… bueno, eso, simplemente conmuta los FET pre o post EQ de los canales de entrada a través del bus plano. Esto fue lo más fácil de diseñar porque básicamente era una copia de la FF6000. Me gustaría mencionar que en 2011 cambié el controlador de auriculares en la FF6000 a uno basado en transistores (también lo cambié en la FSM-600 y en la PM-100), porque el integrado que estábamos utilizando en los circuitos anteriores había cambiado su rendimiento. CUALQUIERA CON UNA FF6000 ANTERIOR PUEDE OBTENER DE FORMULA SOUND UNA PEQUEÑA PCB QUE SE INSERTA EN EL ZÓCALO DEL CIRCUITO INTEGRADO si notan que la salida de auriculares no suena todo lo bien que debería. El controlador de auriculares basado en transistor es tan bueno como cualquier salida de auriculares que he monitorizado, así que lo he vuelto a utilizar.

Las salidas balanceaas en la FF6.2 son ligeramente mejores que en la FF6000. El CMRR (common mode rejection ratio) es un poco mejor porque está sintonizado individualmente en cada salida balanceada. La salida de zona se controla de la misma forma que se controla remotamente en el ZMR80; la ganancia de un operacional (no es un VCA) se modifica para ajustar el volumen desde un panel remoto.

El bus de micro tiene un conmutador en la base del mezclador para que el usuario pueda enrutar los micros de los canales 1 y 2 hacia la cabina o hacia fuera de ella; de nuevo sólo es accesible internamente (again its only accessible on set up).

La mayoría del resto de PCBs de salida son circuitos que ya se utilizaron en la FF6000. El ajuste de curva de crossfader es el mismo.

El vúmetro está basado el el display de la FSM-600. Actualmente estoy rediseñándolo utilizando el vúmetro de 12 LEDs basado en tansistores que usé en las entradas. El motivo de utilizar originariamente el circuito integrado de la FSM-600 era la falta de espacio, pero me las he apañado para meterlo dentro del PCB, aunque conllevase utilizar algún componente SMD.

FF62 Technical for Website

La fuente de alimentación iba a ser la misma que la de la FF6000, pero el primer prototipo mostró que el consumo de corriente era muy elevado, así que tuve que diseñar una nueva placa PCB para la fuente; no era especialmente complicado, pero el diseño de la PSU puede afectar al suelo de ruido. Sin embargo, la nueva placa para la PSU estaba bien.

La FF6.2 tiene dos PCBs por cada entrada, así que tenemos el doble de placas de entrada que en cualquiera de nuestras mesas anteriores. Además, las propias PCBs tienen placas secundarias. Las placas de salida también tienen placas adicionales, así que LA COMPLEJIDAD DE ESTE MEZCLADOR ES SIGNIFICATIVAMENTE MAYOR QUE CUALQUIER OTRO QUE HAYAMOS FABRICADO HASTA AHORA.

PRIMEROS DISEÑOS

El primer prototipo desveló algunos problemas mecánicos que fueron corregidos fácilmente, así como algunos problemas eléctricos; algunos de ellos eran sencillos de resolver, pero había dos problemas de ruido (inicialmente pensábamos que era sólo uno, pero degeneró en tres problemas en paralelo)

Inicialmente pensamos que el ruido era simplemente un problema de toma de tierra, y que encontrando dónde estaba lo resolveríamos fácilmente. Nuestro primera análisis daba a entender que dicho problema estaba en la salida, así que desmontamos las entradas y bajamos a tierra la señal tas la primera etapa de salida: encontramos rápidamente que el punto de masa para la salida estaba en un lugar incorrecto, y lo corregimos.

Sin embargo, cuando volvimos a conectar las entradas, el ruido reapareció. Tras investigar bastante (sobre todo a base de prueba y error; los niveles de ruido de bajo volumen son difíciles de rastrear), nos dimos cuenta de que las resistencias que llevan el audio al bus tenían pistas que eran demasiado largas, y actuaban como antenas, capturando ruido. Redujimos su longitud y el nivel de ruido mejoró en la mayoría de los ajustes, pero cuando se tenía seleccionada la entrada RIAA, era demasiado alto. De nuevo encontramos la causa: una pista que era demasiado larga en el módulo de phono, y reduciendo su longitud finalmente obtuvimos el nivel de ruido que estábamos buscando.

Mientras estábamos buscando el origen del ruido en el primer prototipo, nos dimos cuenta de que el mezclador se estaba calentando más de lo que esperábamos; demasiado caliente para ser aceptable, y la única solución era un par de ventiladores, uno a cada lado del mezclador.

La mayor parte del trabajo sobre los prototipos la hizo Ian McDonald de Formula Sound. Los filtros de frecuencia variable y el control remoto de zona utilizan un control digital de resistencia que nos permite mantener la señal en analógico pero empleando un control digital. Ian McDonald escribió los programas de los controladores PIC tanto del filtro como del panel remoto.

ESTÉTICA

Mientras estábamos trabajando sobre los prototipos, Funktion One estaba diseñando la parte estética del panel frontal. Les enviamos una selección de botones para que eligiesen. Funktion One proporcionó un diseño frontal impresionante que seguramente no se nos habría ocurrido a nosotros, poniendo el etiquetado de entrada en una columna cerca de las salidas, y simplificando así el texto para las entradas. El tipo de letra elegido le da al mezclador una estética radicalmente distinta. Funktion One nos dijo su elección de los knobs (que fue precisamente la que más nos gustaba a nosotros) y eso completaba la estética del mezclador.

FF6.2L Front 1

 

Mientras Funktion One estaba acabando la estética, comenzó el debate sobre cómo debíamos bautizar esta nueva mesa de mezclas. Nuestra sensación es que debía haber alguna relación con la FF6000; “FF” SE HABÍA ELEGIDO ORIGINALMENTE PARA DENOTAR “FORMULA FUNKTION”, así que estaba asumido que tendría el prefijo “FF”.

Se barajaron nombres como “FF600”, “FF60”, y no recuerdo bien quién sugirió “FF6.2” (lo que recuerdo vagamente es una conversación sobre el nombre con Ian), pero todos acordamos que “FF6.2” sonaba bien para este mezclador.

Originariamente EL FRONTAL IBA A SER MORADO DE METAL ANODIZADO, pero no encontramos un morado adecuado, así que optamos por el tradicional negro.

PRIMERAS UNIDADES

Las primeras unidades de producción se ensamblaron y se enviaron a Funktion One para evaluarlas y probarlas con uso real. Salieron a la luz algunos problemas técnicos, un problemilla en la fuente de alimentación y un ruido que sólo aparecía en algunas unidades. Hicimos muchos cambios para mejorar el nivel de ruido, y cada vez ese problema de ruido volvía a aparecer. Finalmente nos dimos cuenta de que el cableado se podía mover durante el transporte y acababa cerca del transformador. Simplemente, se sujetó el cable y asunto solucionado.

Pero el problema de la fuente de alimentación era también difícil de identificar. Inicialmente pensamos que era por el arranque de la PSU, y efectuamos algunos cambios que parecían solucionarlo, pero el problema reaparecía aleatoriamente. Finalmente descubrimos que uno de los reguladores tenía una protección a cierta combinación de corriente y voltaje, así que una ligera reducción en la tensión fue suficiente para resolver este último problema.

Las pruebas de campo de Funktion One proporcionaron muy buenas críticas en el mezclador, especialmente con los filtros de frecuencia variable y con la calidad de audio en general.

Comenzamos a entregar la FF6.2 a finales de 2016, y seguidamente la FF4.2, y las versiones rotatorias de la FF6.2 y FF4.2 este mismo mes (junio de 2017).

PRECIO Y SEGMENTO

El precio de la FF6.2 se fijó despueś de diseñar el mezclador; no había estado pendiente del coste en la fase de diseño (simplemente, me centré en el diseño y el rendimiento). Cuando dicha fase de diseño acabó, hallé la suma del coste de los componentes y la construcción, y me quedé ligeramente sorpendido de que fuese tan alta. El precio de venta refleja lo que cuesta construir una mesa de mezclas en Inglaterra.

La FF6.2 tiene un aspecto ligeramente diferente a los anteriores mezcladores de Formula Sound, pero echando un vistazo más en profundidad a la cadena analógica de señal, o a las placas PCB montadas verticalmente usando componentes discretos, es inconfundiblemente un mezclador Formula Sound. Cuando escuchas su calidad de audio y lo utilizas por primera vez, te das cuenta de que tiene todo lo que se puede esperar de una mesa de mezclas Formula Sound.

¿Y cómo es la FF6.2 en comparación a los mezcladores anteriores de Formula Sound? La calidad de sonido con equipamiento de test/referencia es ligeramente mejor. La ecualización es con atenuación total; todos nuestros mezcladores anteriores (a excepción de algunas FSM-600 y FF6000 personalizadas) tenían una ecualización menos agresiva, así que la FF6.2 suena diferente. A algunos puede que no les guste la ecualización de 4 bandas, pero estoy convencido de que a cualquiera que le guste la System 2000 le gustará la ecualización de la FF6.2. Los filtros PA/PB de frecuencia variable funcionan realmente bien, aunque, como tantas cosas, es cuestión de gustos si se quiere utilizar o no.

DSC02300

La ya famosa System 2000 en una configuración personalizada de 7 canales (no configurada así por Formula Sound)

Actualmente el circuito de phono es el mismo que el de la mayoría de nuestros mezcladores anteriores, incluso hasta en la PM-80, pero tengo un nuevo diseño que -creo- ofrecerá un comportamiento un poquito mejor. Muchos puede que digan que la PM90 suena ligeramente distinta; puede ser porque la PM-90 incorpora un filtro de rumble.

La FF6.2 se ha diseñado y construido para durar lo mismo que cualquiera de nuestras anteriores mesas; nos hemos visto obligados a utilizar unos pocos componentes SMD, pero los hemos limitado a partes donde no había más remedio (bien por espacio o bien por disponibilidad de los componentes), pero la mesa sigue siendo fácilmente reparable y el mantenimiento es sencillo.

Con la FF6.2 ya acabada, pienso en lo siguiente que vendrá; creo que aún queda sitio para mejorar en el diseño de los mezcladores analógicos. Me gustaría crear un mezclador que ofrezca el mejor rendimiento con vinilos, y tengo algunas ideas para conseguirlo. Tengo también algunas ideas para un circuito de micro ligeramente mejor, y también para una etapa de salida aún mejor; ambas mejoras serían pequeñas e incluso difíciles de apreciar, pero CREO FIRMEMENTE Y QUIERO INTENTAR CREAR UN MEZCLADOR TAN BUENO COMO FÍSICAMENTE SEA POSIBLE (medido con equipamiento de test).

La FF6.2 es el mezclador que es gracias a la colaboración entre Formula Sound y Funktion One; el diseño electrónico está totalmente hecho por Formula Sound, pero la estética, la ecualización a 4 bandas y los filtros de frecuencia variable se los debemos a Funktion One y en particular a Mike Igglesden. Juntos hemos creado una mesa soberbia con un sonido espectacular.

 

AÑADIDO POR MÍ:

Tengo que comprobar si los modelos finales de la FF6.2 corresponden a las imágenes anteriores (sacadas principalmente de Thomann UK, si mal no recuerdo), o si se incorporaron los pulsadores transparentes que ya se han empezado a incluir en las PM-100; me suena que alguna foto de FF6.2 con ellos he visto alguna vez. Aquí una imagen de mi nueva PM-100, que los traía de serie:

Formula Sound PM-100 - LEDs-2 (1920x1280)

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Análisis de Denon SC3900

Hola a todos de nuevo.

En primer lugar, quiero dejar claro que voy a intentar dejar de lado ciertos prejuicios que normalmente nos acompañan con las marcas; sin embargo, por otro lado no podemos obviar la historia que cada una tiene. Como podéis adivinar, se trata de la eterna discusión Denon vs. Pioneer.

Mi humilde opinión al respecto es que, partiendo de la base de que ambas tienen unos excelentes productos, y aunque haya gente que lo quiera negar, Denon siempre ha estado ahí con los reproductores de CD para DJ (creo recordar que aquellos dobles enrackables eran los DN-D2000, o algo así). Por otro lado, recordemos que Pioneer, con su serie 500, fue la primera en dar visibilidad a los reproductores de carga superior, más parecidos a los platos de toda la vida. ¿Prestaciones de ambas marcas? Por lo que yo he podido comprobar, muy parejas. He tenido Pioneer CDJ-200S, CDJ-800, Denon DN-S300, DN-S3500, y ahora los SC3900. Y personalmente me ha gustado LIGERAMENTE más Denon, por construcción, robustez y prestaciones, pero, insisto: LIGERAMENTE. Me gustó más el DN-S3000 que el CDJ-800, y por eso vendí este último y me quedé con la pareja de Denon. Pero si hubiese hecho lo contrario, no me habría confundido en absoluto. Por favor, releed lo de «ligeramente», que no quiero discusiones.

Pero, de repente, hace unos años, apareció lo que prometía ser el reproductor definitivo. He querido con devoción la serie SL de Technics desde que tengo uso de memoria musical. Y el SL-DZ1200 prometía ser «lo mismo, para CD». Todos estábamos ilusionados. Era ¡hasta bonito!, comparado con los reproductores con tapa de Cola-Cao que teníamos por aquel entonces. Sin embargo… ¡qué pena! Como concepto era redondo -bueno, cuadrado 😛 -, pero la ejecución dejó bastante que desear. Parecía robusto, «pesaba», pero la implementación de software… Aunque por otro lado, creo que se fue muy cruel con ese modelo; no se le dio opción alguna a «reencauzarse» (y me da la impresión de que tampoco hubo mucho interés por parte de Technics).

Desde entonces, la tendencia habitual en la gama media-alta de las dos principales marcas ha sido, como todos sabéis, que Pioneer optase por una configuración de «jog estático», que detecta la presión para saber cuándo vamos a «scratchear», y cuyo lateral sirve para adelantar o retrasar la reproducción, y por otro lado Denon, incluyendo también ese modo, nos ha dado la posibilidad de utilizar un disco, usando un motor de tracción directa de gran par (en los S3000 era de correa, pero iba bastante mejor de lo esperado.

Sin embargo, la mayoría no nos atrevíamos a dar los toques en el lateral de la bandeja giratoria de los Denon, por varios motivos: era más que probable que, sin querer, tocásemos el disco, y empezásemos a scratchear (el lateral era muy «vertical», y ¡con estrías en vertical, absurdo para hacer un ajuste fino!), y, lo más importante, era una bandeja giratoria «demasiado» pequeña como para tener precisión. Sobre todo, si estábamos haciendo una sesión mixta vinilo/CD, era ciertamente distinto el tacto, la precisión al empujar o frenar, que uno y otro reproductor ofrecían. Total, que, al final, acabábamos usándolo como si fuese un Pioneer. O, en mi caso, directamente usaba sólo el pitch bend (+ y -), y el deslizador del pitch.

Seguíamos sin tener la sensación de tener «el reproductor definitivo», el que fuese una traducción directa de un Technics SL sobre audio digital. Sí, teníamos emuladores, mapas MIDI, loops, samplers… y precios de todos los olores, colores, sabores, tamaños y formas. Pero parecía que siempre podía aparecer «algo más».

¿Sería ese «algo más» el SC3900?

 

DENON: SERIES DN-S Y SC

Ya centrándonos en Denon, como os decía he sido el feliz poseedor de un DN-S3000, un DN-S3500, y ahora de un SC3900. No tuve la suerte de tener un DN-S3700, pero, la verdad, no aportaba mucho, PARA MI CASO, con respecto a un S3500.

El proceso mental en mi caso fue: vale, un DN-S3000 «incluye» un CDJ-800 (excepto la creación automática de loops, que iba MUY BIEN en los Pioneer). Adquirí el S3000. Terminé muy, muy contento con ellos. Pero eso de la tracción directa que tenía el modelo sustitutivo, el S3500, sumado a los efectos, al sampler… me llamaba.

Y lo adquirí .Lógicamente, miré también Pioneer, pero me seguían convenciendo más las prestaciones del S3500 que las de un CDJ-850 o incluso un CDJ-1000, para lo que yo necezitraba. Los compré en EEUU, y, por lo tanto, venían con transformador; ningún problema.

Sin embargo, eran muy «exquisitos» con los CDs mal grabados: resulta que estaba usando una grabadora en mal estado, y parte de mi colección de CDs (que, gracias a Santa Tecla, conservo también en WAV) daba problemas al reproducirlos. Pensé en regrabar los CDs, pero era un trabajo realmente tedioso. Y no, NO ME GUSTA REPRODUCIR MP3 para pinchar (a ver si publico algo relativo a eso).

Así que, de nuevo, miré qué había en el mercado. Y parece que me leyeron la mente, no sólo porque los SC3900 pueden reproducir desde un pendrive, sino que, además, ¡pueden reproducir WAV y compartir contenidos en hasta 4 reproductores! ¡Genial! Que sí, que luego tienen MIDI, control de emuladores, y tal… pero sigo pinchando a la vieja usanza, y no creo que le vaya a sacar mucho partido.

Vendí los 3500 una mañana, y por la tarde encargué los SC3900. Al día siguiente llegaron, y…

 

DENON SC3900: PRIMERAS IMPRESIONES

Por suerte, el sistema de fijación del disco es bastante más robusto que en los DN-S3500 (¿quién no ha roto alguna de las «grapas» de plástico que venían? En mi caso, acabé usando un par de juntas tóricas).

La construcción es robusta. Parecen más planos que los 3500, pero más anchos y largos (¡Hala, a rehacer el soporte!). Sin embargo, habría preferido que mantuviesen el frontal de metal; ahora, la apariencia es más «plasticosa», que era algo que no me gustaba de Pioneer. Y pesa. Pesa mucho más de lo que pudiese parecer.

El disco encaja a la perfección, y no parece tener oscilaciones ni holguras. Eso sí, me imagino que a medida que pase el tiempo, el patinador ofrecerá menos adherencia: por ahora, con media hora de uso, el vinilo apenas desliza. Le tendré que poner otro patinador; no problem.

Me gusta que la ranura del disco sea estrecha, para evitar en la medida de lo posible la entrada de polvo. Y que la del USB lleve tapita, pero no se retira con mucha facilidad, y no parece muy robusta en su sistema de anclaje para no perderla.

Sin embargo, hay cosas que, en el ratillo que estuve manejándolo ayer, sí eché realmente de menos: los efectos y, sobre todo, el sampler.

Por suerte, el efecto de «frenada» ahora está implementado directamente en una ruedezitra con la que regulamos el tiempo que tarda en pararse desde que se pulsa el botón de Start (igual que el tiempo de arranque). Y funciona bien, sin generar artefactos, al menos que se escuchen. Pero un flanger o un paso bajo-medio-alto, como tenía en los 3500, viene bien.

Lo peor es lo del sampler; vale, tenemos 4 «hot cues» que funcionan a las mil maravillas, y podemos desatar la vena creativa con ellos, yéndonos a puntos que podemos usar como «samples». Pero la reproducción sigue a partir de ese punto, así que no podemos, por ejemplo, capturar una frase o una palabra y repetirla de vez en cuando; tenemos que ir a ese punto, y sigue la reproducción desde ahí.

Otra cosa extraña, al menos sin tenerla controlada aún, es la generación de bucles. En el 3500 no era automática, y para recortar tenías que ir al modo «trim». Ahora es más fácil: recortamos a la mitad, mitad de la mitad… es decir, es fácil hacer una «metralleta». Peeero, al menos por ahora, no sé cómo hacer el loop automático y que quede bien. Y era música house muy rítmica, sin mucho «groove» que pueda confundir al reproductor.

El scratch va MUY, MUY BIEN. Es preciso; hay una pequeña guía visual de la posición en la que estás en la propia pantalla (parecida a la «galleta» central de los Pioneer). Y el sonido es bastante natural, sin el típico problema de interpolación de este tipo de aparatos (al menos, para mis oídos de hormigón armado).

Eso sí, LO QUE MÁS ME GUSTA: ponerlo en modo vinilo, y usarlo como si lo fuese. Empujar el giradiscos, poner el dedete para frenarlo un poco… tiene MUY BUEN TACTO. El disco, vale, no es un 12″, sino que es de 9″, pero sí nos da esa precisión que añorábamos en los modelos anteriores, a los que hacía referencia al principio de este artículo. Habría dos cosillas a mejorar en ergonomía: la pantalla sobresale del frontal, y hace que, si queremos emplear el mismo «arco» al empujar el disco que usaríamos en un Technics SL, los dedos impacten en la parte lateral de la pantalla, o incluso nos los pillamos un poco. Imagino que los «turntablists» posiblemente pongan el SC3900 en posición transversal, para tener más recorrido. Y la otra mejora «ergonómica» son los botones de pitch bend; en el 3500 eran muy, muy cómodos y fáciles de localizar aun sin mirar el reproductor. En el 3900 están prácticamente enrasados con el frontal, y, al menos en este poco tiempo que he tenido, no me resulta tan intuitivo localizar esos botones.

Una cosa que me ha llamado la atención es que los botones de CUE y START ahora son rígidos. Muchos érais los que os quejábais de que en los modelos anteriores (al menos en el S3000 y el S3500) fuesen de «goma semirrígida», pero en mi caso, esa «flexibilidad» nunca me ha molestado, salvo porque me daba la impresión de que, en el futuro, pudiese amarillear en ambientes de humo o con luz del sol.

El pitch va muy preciso, pero estoy esperando el día en que a los fabricantes de este tipo de reproductores se les ocurra la idea de poner un pequeño vástago interno que haga que se pueda activar o desactivar el «enclavamiento» en el 0%. Es algo físico; no afecta a la resolución del pitch en sus alrededores (como pasa en un Technics SL-12×0 MK2), pero muchos de nosotros tenemos la manía de huir de ese «click» central. Otra cosa relacionada con el pitch que estoy deseando ver en algún modelo es un recorrido «asimétrico»; muchos de nosotros solemos pinchar el 99% de los temas con pitch positivo, o no inferior al -1% ó -2%. Por lo tanto, esa parte negativa del recorrido está desaprovechada; con un reproductor digital, se podría subsanar muy, muy fácilmente. O bien poniendo el rango de -2 a +10 (por ejemplo), para ganar precisión, o bien permitiéndonos ajustar a los usuarios dónde poner el 0% dentro del recorrido. No me parece mala idea.

Eso sí, también tengo que decir que me llevé un «sustete»: abrí el primer SC3900, y todo como la seda. Pero al montar el segundo, y darle a reproducir un disco, de repente se empezó a acelerar el plato hacia atrás que creía que saldría volando. Y al rato, en una mezcla, me quedé sin audio. Apagué y volví a encender, y ya parece estabilizado, pero me dio un poco de «malas vibraciones». A ver si hoy o mañana los pruebo más en profundidad.

Intentaré subir fotos para enriquecer esta entrada un poco, e ilustrar algunos puntos a los que me refería.

Mientras tanto, mi reflexión: hay cosas que echo de menos de los 3500 (sampler y efectos, principalmente). Otras cosas son geniales: el tacto y la fuerza del plato, el poder reproducir en varios SC3900 desde un pendrive, que lea WAV (aún lo tengo que comprobar), o el funcionamiento de los hot cues. Sin embargo, debo decir que, para aquellos que estéis acostumbrados a trabajar sólo con CDs, este SC3900 no aporta una gran cosa. Es decir, para DJs más «clasicotes», entre los que me encuentro, posiblemente el salto generacional que supone no es tan grande como podríamos esperar. Pero si queremos chutar música desde un USB sin gastar ni vinilo, ni lente, ni nada, es buena inversión. Y, por supuesto ,si queremos usar MIDI, emuladores, etc. Pero eso aún me viene grande, je, je.

A ver si profundizo un poco más, o incluso hago algún pequeño vídeo.

Un saludo, y gracias por leerme 🙂 Ah, y disculpad que a veces me ponga un poco pesado con las divagaciones…